Purpurina....

He aprendido a llorar purpurina,
y a preparar el guión tras la piel desnuda
de unas manos mas bien huesos, tendones, furtivas de movimientos, silenciosas…

He tratado de hablar con mesura,
pero sólo recibí silencio,
cuando la noche observaba las olas, el viento,
la noche...


Pero un día esta barca surcará las aguas,
negras aguas de la noche.
Y la rabia empujará a la marea
para borrar las huellas que dejan las gaviotas en la arena.
Sólo nos queda esperar,
agazapados entre las dunas.

Alguien que espera todavía....

Porque todo concluye, pero nada se calma;

como la luz de un sueño

que olvidas al despertar.

Porque todo se pierde, todo se esconde.

Porque cuando llega la noche

corre a refugiarse en el lecho del río, con las estrellas.

Y las notas de esta canción,

le traen recuerdos

de días lejanos.